De entre las diversas tareas a realizar antes de mudarnos, una de las más importantes es medir las dimensiones de nuestro nuevo hogar, para comprobar que todo encaja a la perfección.
Algo que puede ocurrir a menudo, es darnos cuenta que nuestro actual mobiliario no se adecúa como debería en nuestra futura casa. Actualmente existen varias páginas web de venta de segunda mano a las que podemos recurrir para reducir el coste global que supone además del traslado, adquirir nuevos muebles.
A continuación os dejamos tres ejemplos:
- -Segundamano: Consolidada web y muy bien valorada por sus usuarios.
- -Mil Anuncios
- -Troc: A diferencia de los dos anteriores, disponen de tiendas físicas dónde exponen los objetos a vender.
La siguiente tarea que debemos abordar es el embalaje previo para conseguir que todo llegue en perfectas condiciones en destino.
¿Por dónde empezar?
Para una buena mudanza es aconsejable comenzar por embalar todo aquello que no nos resulta imprescindible para el día a día. Se empieza primero por altillos, trasteros, fondos de armario, y se deja para el final todo lo de uso diario, como cubiertos, platos, o ropa de cama…
Siempre es aconsejable que el embalaje esté incluido en una mudanza hecha por profesionales, ya que el realizado por alguien inexperto, suele ser deficitario y los enseres pueden llegar dañados al destino, con el consiguiente problema para el usuario y para la propia empresa de mudanzas. Si el cliente ha contratado un seguro, no le cubrirá los desperfectos si el embalaje no ha sido hecho por personal cualificado.
Si aún así nos vemos capacitados para hacerlo, de gran utilidad pueden ser los videotutoriales que podemos encontrar como estos:
La improvisación no es buena compañera en una mudanza, por lo que se debe programar con antelación para poder sopesar todas las opciones posibles.
Este artículo es una colaboración de Patricia López de Mudanzas López Barcelona
